domingo, 7 de marzo de 2010

AUTOGESTIÓN DE LA SALUD: UN ESCUDO NATURAL QUE NOS PROTEGERÁ DE LOS PROMOTORES DEL VIH/SIDA

(Comentario a la noticia aparecida el sábado 27 de febrero en los periódicos Público y El País)

Siempre debemos estar alerta ante este tipo de noticias, que en principio parecen dichas con mucha rigurosidad y, si rascamos un poco, nos damos cuenta de que no hay ningún estudio serio ni informaciones contrastadas con otras fuentes, e incluso a veces directamente mentiras y difamaciones; es lo que en periodismo llaman “una noticia panfletaria”, es decir, que sólo hablan de la visión interesada de una de las partes.

Resulta que nuestra querida compañera Christine Maggiore, murió de herpes generalizado por intenso estrés y neumonía, y lo que dice el periódico Público es que estas enfermedades suelen aparecer en personas que mueren de SIDA, ¿cómo se puede pretender que porque suelen aparecer en personas con SIDA esté indicando, sin ninguna duda, que se trata de SIDA, o que han sido causadas por el VIH? ¿en qué hechos científicos se basan? ¿sólo en esa correlación? Con esa misma lógica podrían igualmente decir que alguien con calambres, trastornos del sueño, crisis de ansiedad y fatiga crónica, es porque padece fibromialgia, porque estas dolencias suelen aparecer en personas con fibromialgia. Lo que hace este periódico es cualquier cosa menos riguroso. Tampoco dicen que los herpes y la neumonía también aparecen en personas que no han sido jamás diagnosticadas VIH+ y en personas que nunca han tenido SIDA, y además, y esta parte es importante, cuando dicen que Christine obtuvo “resultados contradictorios” ¿contradictorios? ¿a qué se están refiriendo?, por qué no mencionan que dio tantas veces positivo como negativo, e incluso indeterminado, cuestión que parece relevante, ya que si como presume este periódico panfletario ella murió de SIDA, tendrían que reconocer al menos que los test no sirvieron para nada al no ofrecer un resultado inequívoco. Y su hija, pese a que las autoridades intentaran encarcelar a Christine -hay que tener en cuenta que ella era una activista muy reconocida y aclamada- por negligencia criminal y quitarle la custodia de su otro hijo para "protegerlo", se demostró con todo el rigor de los médicos de la medicina oficial que murió por una reacción fatal al antibiótico amoxicilina, si hubiera sido otra la causa de su muerte y estuviera implicada su madre de algún modo -como sugiere este diario panfletario-, no os quepa la menor duda de que hubiera ingresado en prisión.



Por otra parte, referente al político que más sensatamente ha tratado el tema del SIDA en el mundo, Thabo Mbeki, mientras fue presidente de la República de Suráfrica, dice este periódico -siempre al servicio del capital-, que es culpable de las muertes entre 1999 y 2008, 365.000 personas (de los que eran niños no digo nada, porque sólo lo añaden por sensacionalismo de bajos fondos) diagnosticadas con SIDA, por falta de tratamiento. Veamos entonces, se deduce directamente de la noticia que todos ellos no hubieran muerto de haber sido tratados con los antirretrovirales, pues bien, esto suscita una pregunta ¿de qué mueren entonces todas las cientos de miles de personas en la República de Suráfrica y en el resto del mundo cuando son tratados con los antirretrovirales hipertóxicos que Mbeki quiso retener hasta que hubiera alguna evidencia de que ofrecía algún beneficio? y no me refiero al beneficio incuestionable que tiene para la farmaindustria (o directamente la Farmafia como ya dicen algunos), porque parecería que desde que ya no está Mbeki en el gobierno y desde que se dan los antirretrovirales nadie que los toma muere. Esto sí que es panfletario, en Europa, por ejemplo, prácticamente todos los “muertos de SIDA” habían tomado los antirretrovirales porque los pagamos del erario público, de hecho, la mayoría y muchos que yo mismo conozco, han tomado una media de cinco a diez medicamentos antirretrovirales diferentes antes de morir, entonces, si este periódico dice que aquellos 365.000 diagnosticados murieron por no recibir el tratamiento, ¿de qué mueren los que sí los reciben? Y en el mismo sentido ¿por qué cree que se hubieran salvado aquellos de haber recibido el tratamiento si los que lo reciben no se salvan tampoco? Esta práctica panfletaria al servicio del capital les vuelve a cegar y sólo publican la visión interesada de una parte, la que paga, por eso tampoco dice que el nuevo ministro de salud actual, que sustituyó a Tshabalala-Msimang -ministro de salud durante el gobierno de Thabo Mbeki-, en una de sus primeras intervenciones, anunció en septiembre de 2009 el comienzo de una campaña de vacunación de niños y distribución de vitaminas para impulsar el sistema inmune, que era justo lo que se hacía durante el gobierno de Mbeki. También omite el hecho de que durante tres años consecutivos no se publicaron en las estadísticas los datos de las muertes relacionadas con el HIV porque, contrariamente a como se esperaba, habían descendido (2001-2003, periodo en el que aún estaba Mbeki en el gobierno).



En lo que respecta a las personas que viven muchos años habiendo sido diagnosticado VIH+ y sin desarrollar nunca el SIDA, los "controladores a largo plazo" como nos quieren llamar ahora, siguen creando mentiras para tapar mentiras. Lo que dice haber descubierto este laboratorio catalán (Hivacat), que en realidad es un consorcio público-privado donde colaboran la Generalitat de Cataluña, la Fundación La Caixa y los laboratorios Esteve, son unas defensas (las alfa-defensinas), que a renglón seguido, cuando se va alejando el sonido del bombo y platillo, dice que servirá para abrir "nuevas expectativas terapéuticas", entonces podemos afirmar que lo que realmente han descubierto son nuevas expectativas de mercado, lo cual no me extraña en absoluto, es más no podía ser de otra manera teniendo en cuenta que ese equipo lo forma la banca y la farmaindustria, lo de la Genreralitat será sólo para poner dinero -de los contribuyentes, como siempre- y medios para catapultar los resultados. Como otro logro, exponen que "evitaría el tratamiento antirretroviral a miles de personas", ¿por qué les preocupará si ellos mismos reconocen que los antirretrovirales son muy efectivos y ofrecen una mejoría en la calidad de vida de quienes los toman?, sencillamente porque es muy evidente que no es así, y ellos lo saben, aunque no es políticamente correcto decirlo y va contra los intereses de quien paga. El hedor se sigue acumulando ¿cuál será la capacidad de la población para soportar semejante corrupción y fraude? ¿cuánto tiempo más habrá de pasar? ¿y cuántas muertes más tendremos que lamentar antes de que reaccionemos para decir BASTA?



Ni que decir tiene, que si estas alfa-defensinas que muchos tienen de forma natural pueden inhibir el VIH y deshacerse de él sin más -como afirma este diario- ¿no será porque en realidad (como lo han venido señalando miles de científicos de muchos países y diferentes disciplinas y a los que no se les conoce conflicto de intereses) el VIH, incluso admitiendo que existiera, no es suficiente ni necesario para causar el SIDA? y como reconoció el propio Luc Montagnier (premio Nobel 2008 en medicina por el descubrimiento del VIH, y que no es ningún disidente, ni negacionista, de la hipótesis oficial) "si tenemos un buen sistema inmune todos podemos deshacernos del VIH en cuestión de semanas sin mayor problema" y teniendo eso en cuenta ¿no sería lógico pensar que lo único que habría que hacer sería fortalecer y mantener nuestro sistema inmune? como también reconoció el mismo Montagnier "con mejores nutrientes y un nivel aceptable de antioxidantes, condiciones higiénicas aceptables, etc".

Por otra parte, conozco a muchas personas sanas que llevan hasta 24 años diagnosticadas de infección por VIH y que nunca han desarrollado SIDA, pues bien, ninguna hemos sido invitadas a participar en este estudio, y me pregunto si yo conozco a muchas personas por todo el estado español que a su vez conocen a otras muchas y ni una sola ha participado en este estudio ¿quienes han participado en este estudio si ellos mismos dicen que en el estado español hay 250 personas de este tipo? Que, por cierto, somos muchas más, y me surge otra pregunta más inquietante aún ¿cómo han contado que somos 250 personas si muchos de nosotros hace mucho tiempo que dejamos de ir al médico de Medicina Interna-Infecciosos? los que hace mucho que no van a su cita ¿constan como “controladores de elite”, muertos, o sencillamente desaparecidos?



Desgraciadamente, no es nada nuevo esta persecución a los llamados "negacionistas" del SIDA, se usa esta palabra para insultarnos, en una clara alusión a las personas que negaron el holocausto nazi, nos comparan con aquellos que negaron o niegan el holocausto nazi, cuando en realidad nos tendríamos que cuestionar ¿quién está negando qué? nosotros no negamos la existencia de personas que presentan inmunodeficiencias, eso no tendría sentido, en lo que discrepamos es en explicar cómo llegaron a tener esas deficiencias, es decir, su origen, su causa, y en consecuencia, su tratamiento, porque el mayor perjuicio que se ha causado, y se sigue causando, a la población civil es el no haber acertado en el tratamiento (antirretrovirales, para tratar los retrovirus) porque no se ha identificado correctamente la causa que ha llevado a deteriorar el sistema inmune de las personas que mayormente presentaban inmunodeficiencias, ciertos homosexuales (por un estilo de vida de abuso de drogas, mayormente inhaladores de nitrito, malnutrición o desnutrición, abuso de antibióticos para tratar las ETS, falta de descanso, etc.), consumidores de drogas intravenosas (evidentemente por las drogas que consumen, malnutrición o desnutrición, falta de higiene y descanso, etc.) y en una proporción mucho menor las personas hemofílicas (por su enfermedad son conocidos inmunodeprimidos ya antes de la era del SIDA, el factor coagulante artificial, el recibir demasiada sangre procedente de otras personas, con una esperanza de vida bastante inferior al resto de la gente, etc.). De esta manera, al no haber acertado en la causa, el tratamiento no sólo no es el adecuado, sino que es altamente tóxico y se administra a personas que ya tienen un sistema inmune deficiente y seguro que otros sistemas también están deteriorados, de manera que no pueden soportar (unos menos que otros) los efectos de estos antirretrovirales, que son en realidad auténticas bombas de relojería, y acaban muriendo en su mayoría, o en el mejor de los casos acaban con los sistemas deteriorados y un estado general de salud deplorable.



Los que yo llamo "oficialistas" del SIDA, por seguir a pies juntillas las directrices oficiales marcadas, que, por el contrario, no es ningún insulto sino una manera de diferenciarnos para poder saber a qué nos referimos, sí que están negando la posibilidad de haberse equivocado en algún término en el proceso de investigación, niegan también la posibilidad de admitir que los antirretrovirales son demasiado tóxicos para dárselo a cualquier persona sana, peor aún si la persona está inmunodeprimida, y lo más alarmante es que incluso niegan que haya un número importante de científicos, médicos, virólogos, etc., incluso varios premios Nobel y profesores eméritos de universidades, que disienten de la hipótesis oficial y que creen honestamente que se debería seguir investigando y que no se debería descartar ninguna hipótesis; e incluso niegan que en ciencia se pueda cuestionar y disentir de la hipótesis mayoritariamente aceptada. Parece que el ejercicio de negar es más propio de los oficialistas que de los disidentes.



Si no se hubieran cuestionado las hipótesis mayoritariamente aceptadas en muchos asuntos en toda la historia de la ciencia, y más aún en la medicina, habríamos avanzado muy poco, y estaríamos aún hoy repudiando, apartando y marginando a las personas que hubieran sido diagnosticadas con Beri-Beri, Pelagra, Escorbuto, etc. ya que mayoritariamente y durante demasiados años estuvieron consideradas enfermedades infecciosas y contagiosas, y cuando ya no se podía prolongar más lo insostenible, y se admitieron y consideraron otras hipótesis hasta ese momento negadas o censuradas, se reconoció que estas enfermedades eran debidas a diversas carencias nutricionales. Exactamente igual que ahora están haciendo con el SIDA. Cuanto daño hecho en nombre de la ciencia por los que dicen trabajar para protegernos, la opción más sensata a día de hoy es protegernos de quienes dicen protegernos, y no sólo en la medicina, también en la política, en la ciencia, etc. que en realidad siempre van de la mano, porque los dueños y pagadores son solo uno.


Raúl (ARIS)
Asociación para el Replanteamiento Integral de la Salud