jueves, 29 de enero de 2009

Color Humano , de su disco Burundanga (1999)



Se anunció una nueva epidemia
sin dato cierto ninguno.
Los medios la contagiaron al mundo entero.
Unos tests que no demuestran nada
sirven para apuntar enfermos.
Es la fatalidad.
Poco a poco se apagan sin saber.
Dime cuál es la relación
entre VIH y la fatalidad,
dime porqué tanta confusión
entre mentira y verdad.
Es el momento de reconocer
que hay otras vías para entender.
Cuando hay daño siempre hay causa,
ya es hora de ir a buscar.
Y si escondes cierta verdad,
es no asistencia a persona en peligro.
Estado débil,
estado malo,
estado grave,
estado enfermo,
estados unidos por la locura.
Dime cuál es la relación
entre VIH y la fatalidad,
dime porqué tanta confusión
entre mentira y verdad.

Color Humano , de su disco Burundanga (1999)
Tema ¿H.I.V.?

Tratamiento alternativo en 200 pacientes VIH positivos de diferentes países


"La salud no es una receta; es una disciplina"

Juan José Flores. M.D., Ph.D.
Mohamed Al-Bayati Ph.D., D.A.B.T.
Christine Maggiore, Directora Alive and Well, Los Angeles, USA.
Alejandro Flores, Cofundador Vivo y Sano México.

I - Introducción.

Este trabajo NO fue escrito con la intención de solo presentar resultados obtenidos a nivel de laboratorio o a nivel de tratamiento clínico. Éste fue escrito con la intención específica de que el paciente diagnosticado como seropositivo” tenga un arma con la cual defenderse del ataque que día a día sufre por parte de las compañías farmacéuticas, por parte del 'establishment' médico mundial y por parte de todos aquellos farsantes que quieren hacer pasar sus balbuceos y tartamudeos por discurso científico.

Si hay una lección que he aprendido desde que el “Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida” fue prácticamente inventado hace ya 20 años, es que los días en los que el paciente esperaba de forma pasiva las órdenes del médico todo poderoso se han ido para siempre. Me ha sucedido a mí, a mi familia y le sucede día a día a mis pacientes: creer con fe ciega en tu médico te puede llevar a la muerte.

Tampoco yo soy el único autor de este trabajo. Este documento fue escrito por todos mis pacientes y todos los activistas y científicos que a nivel mundial han colaborado con sus historias y su labor desinteresada. Es por esta razón que Christine Maggiore y Alejandro Flores figuran como coautores de esta investigación; el trabajo de divulgación y coordinación de pacientes que ellos han realizado ha sido de crucial importancia para esta investigación. Por primera vez en mi vida como investigador, las opiniones de gente completamente fuera del campo de la medicina eran tan importantes o más, que las de mis colegas y por primera vez en mi vida profesional como médico, lo que decidía el paciente era mucho más importante de lo que yo podía decidir por ella o por él.

Es de gran importancia que el paciente asuma un rol activo en el manejo de su salud. No basta con señalar a los supuestos culpables de este inmenso malentendido. Este acto de laxitud intelectual nos libera de asumir la responsabilidad sobre todo lo concerniente a nuestra salud. Digo esto basándome en mi experiencia como médico tratando a pacientes “seropositivos” desde el año de 1987: aquellos que entendieron que la salud no es sólo una receta sino una disciplina sobrevivieron; los que sustituyeron el AZT y los famosos “cocteles” con rituales y otro tipo de pastillas por lo general mueren o viven en un estado de perpetua enfermedad. En lo que se refiere a nuestra salud no hay salidas fáciles.-----------


II. Antecedentes Históricos de Vivo y Sano México.

En el año de 1987, en el estado de Veracruz México, se fundo “El Patronato Veracruzano de Lucha Contra el SIDA”. Esta organización no gubernamental fue creada con la intención de monitorear las acciones que los gobiernos a nivel estatal y federal, desplegaban para resolver el problema del SIDA. En aquél entonces trabajábamos utilizando la información que nos era suministrada por la Organización Mundial de la Salud. Este organismo pronosticaba que para finales de siglo XX el SIDA alcanzaría el grado de pandemia. Obviamente nuestro estado era de alarma. Pero curiosamente, la cifra de gente que había muerto a causa de este supuesto retrovirus VIH se mantuvo estable durante años. La discrepancia entre los pronósticos estadísticos que nos ofrecía la OMS y la cifra real de muertos por el VIH que nos brindaba el gobierno veracruzano era inmensa. Irónicamente, la Secretaría de Salud del Estado de Veracruz, a la cual se supone debíamos monitorear, estaba manejando las cifras correctas. Desde el comienzo debimos monitorear a la Organización Mundial de la Salud, a la CDC (Center for Disease Control) y al NIH (National Institute of Health); fueron estas instituciones las que desde el principio se dedicaron a manipular las estadísticas con el fin de hacer que estas coincidieran con sus predicciones apocalípticas.

Mi desasosiego crecía al ver como mis pacientes iban muriendo, uno a una, al ser estos introducidos al tratamiento con el AZT. Pero entre tanta muerte comencé a observar que mis pacientes con los recursos económicos para comprar los anti-retrovirales morían, mientras que los pacientes que provenían de zonas rurales paupérrimas de manera misteriosa, sobrevivían: 2+2 siempre me daba 5 y poco a poco mi escepticismo también crecía. En 1997 mi hijo Alejandro me mando desde Los Ángeles “Inventing the AIDS Virus” del Dr. Peter Duesberg: “Por favor estúdialo y dime que piensas” me dijo con tono preocupado. No me tomó mucho tiempo comprobar de manera retrospectiva los resultados en las investigaciones del Dr. Duesberg. Observé que en efecto, en la mayoría de los casos, los pacientes expuestos a la toxicidad de los anti-retrovirales morían. A finales de ese mismo año di una conferencia de prensa en El Diario de Xalapa del Estado de Veracruz en donde de manera definitiva me distanciaba de la teoría de que el síndrome de inmunodeficiencia es adquirido mediante el supuesto retrovirus VIH. En 1997 se estableció contacto con Christine Maggiore en Los Ángeles y con el Dr. Roberto Giraldo en Nueva York y se fundó HEAL México, que en el año 2000 se convertiría en Vivo y Sano México.

Esta investigación es el resultado de ese contacto inicial. Christine Maggiore comenzó a referirme cientos de pacientes diagnosticados como “seropositivos”. Todos ellos y ellas pensaban que iban a morir. Al observar cuanto dolor y muerte una hipótesis científica equivocada había causado, no pude evitar sino sentir rabia. Del año de 1998 al 2001 traté a docenas de pacientes en México, provenientes de todo el mundo, sin tomar en consideración su estatus como “seropositivos”. Regresé a la medicina que mi padre practicaba; una medicina que se concentra en los síntomas específicos del paciente: si los síntomas indicaban malaria trataba la malaria, si los síntomas indicaban desnutrición, trataba desnutrición. De manera sorpresiva, observé como la mayoría de mis pacientes se recuperaban. No pasó mucho tiempo para que nos diéramos cuenta en Vivo y Sano México y en Alive and Well Los Ángeles, que un estudio sistemático que se basara en estos resultados clínicos era absolutamente necesario.

Fue entonces cuando Vivo y Sano México estableció contacto con el Dr. Mohamed Al-Bayati. Junto con él, Christine Maggiore y la Dra. Lisa M. Hosbein en Sacramento California, se elaboró un protocolo de investigación al cual se tituló: Clinical Trials in AIDS Patients. Los antecedentes y la metodología que establece este protocolo son la base de Tratamiento Alternativo de 200 Pacientes VIH Positivos de Distintos Países. Como mencioné al principio de este escrito: esta investigación se realiza con el objetivo principal de unir los resultados a nivel de laboratorio obtenidos por el Dr. Peter Duesberg, el Dr. Roberto Giraldo, el Dr. Mohamed Al-Bayati et al, con los resultados a nivel de tratamiento clínico que he venido obteniendo desde 1998, para que el paciente tenga un documento en sus manos que fundamente su posición como disidente y para poder establecer precedentes que puedan ser utilizados en corte en caso de que el paciente se vea en la necesidad de defenderse a nivel judicial. Este documento debe ser visto como un arma que aquella persona diagnosticada como “seropositiva” podría utilizar para defender su derecho inalienable de decidir por si misma todo aquello que concierne a su salud.


III. Protocolo de Investigación.

Antes de introducir los casos clínicos más relevantes para este estudio, quisiera incluir la traducción de una síntesis del protocolo de investigación Clinical Trials in AIDS Patients. Hago esto con la intención de que se entienda la relación directa que existe entre este protocolo, terminado en el mes de marzo del 2000 y Tratamiento Alternativo de 200 Pacientes VIH Positivos de Distintos Países. En el primero se establecen los antecedentes teóricos y la metodología que se siguieron en el segundo. Tanto en el protocolo como en esta investigación, el Dr. Juan José Flores M.D., Ph.D. y el Dr. Mohamed Al-Bayati Ph.D, D.A.B.T. figuran como autores.


Antecedentes y Planteamiento del Problema.

La hipótesis-VIH establece que el VIH causa el SIDA por el hecho de que mata las células CD4+T directamente o indirectamente después de un largo periodo de incubación (aproximadamente 10 años). El número de estas células puede alcanzar niveles muy bajos que pueden llevar a originar una severa deficiencia inmunológica. Pacientes con una severa deficiencia inmunológica (CD4 + Células T <>

Al-Bayati, 1999 y Duesberg, 1992 revisaron la epidemiología y patogénesis del SIDA a nivel mundial y no encontraron ningún hecho médico que estableciera al VIH como la causa del SIDA. Aproximadamente el 90% de los casos de SIDA en los Estados Unidos y Europa se observaban en hombres homosexuales y personas adictas a las drogas. Los usos crónicos de alcohol, heroína, cocaína, metamfetaminas y nitratos de akyl causan problemas crónicos de salud en el sistema nervioso, en el sistema respiratorio, en el sistema cardiovascular, en los riñones y otros tejidos. La mayoría de estos problemas de salud son diagnosticados como idiopáticos, y son tratados con altas dosis de glucocorticoides y/o drogas cytóxicas. Hombres homosexuales con vida sexual activa por lo general usan drogas ilícitas, alcohol y glucocorticoides rectales. El tratamiento de un paciente con prednisone a 60 mg al día puede desarrollar SIDA en un periodo de 3 meses. Esta dosis regularmente se le administra a pacientes con fibrosis en el pulmón, thrombocyptopenia y otras enfermedades crónicas inducidas químicamente.

Fauci et al, en su libro nos provee con evidencia médica extensiva que indica que el SIDA en Europa y Estados Unidos es causado por: 1) el uso de drogas ilícitas y el abuso de alcohol y 2) por el uso extensivo de medicamentos (especialmente glucocorticoides) para tratar estas enfermedades que resultan del abuso de estas drogas. También en este mismo estudio, Fauci et al, nos otorgan la evidencia de que el SIDA en África es causado por hambruna y desnutrición. Aún así, no mencionaron una sola palabra en su extenso capítulo sobre el SIDA (pp. 1791 - 1856) o en alguna otra página de este libro, que muestre que el VIH puede matar una célula. Tampoco pudieron explicar las razones que causan los síntomas de los pacientes con SIDA.

Los resultados de los casos clínicos en los cuatro estudios mas importantes sobre el AZT que llevaron a la aprobación de esta droga por la FDA de los Estados Unidos para tratar pacientes infectados con el VIH, muestran que al menos el 77% de los 2, 349 pacientes que participaron en estos estudios eran VIH - negativos antes de haber sido tratados con AZT. Los resultados de estos estudios claramente demuestran que la hipótesis - VIH es completamente falsa porque el SIDA en el 77% de estos pacientes fue causado por agentes y procesos distintos del VIH. Los pacientes con SIDA que son VIH - negativos y que son considerados por Fauci et al como pacientes que sufren de “lymphocyptopenia Idiopática en las células CD4+ T” son un ejemplo más del porqué el VIH no es la causa del SIDA.
Sumando a esto, hasta el primero de enero de 1997, existían 28, 690 casos de gente infectada con el VIH viviendo en los Estados Unidos, sin que ninguno de ellos sufriera de problemas de salud, algunos de ellos con mas de 10 años de haber sido diagnosticados como VIH - positivos. Este grupo es llamado por Fauci y sus colegas como “long-term nonprogressors” (no-progresores a largo plazo). Esto también es evidencia directa de que el VIH es un virus inofensivo.

Al-Bayati menciona que la aparición del SIDA en los Estados Unidos y Europa entre adictos a las drogas y homosexuales a finales de los años setenta y principios de los 80 coincide con otros varios factores. Estos factores incluyen la epidemia en el uso de drogas ilícitas, principalmente por medio de la cocaína crack y de la heroína en los años setenta; la aprobación de los glucorticoides en aerosol por la FDA de E.U. en 1976; el amplio uso de inhalantes con glucocorticoides recetados para tratar enfermedades respiratorias crónicas que resultaban de la inhalación de la cocaína y la heroína; el uso extensivo de los nitratos de akyl por homosexuales para facilitar el sexo anal (1970’s); y el amplio uso de esteroides para tratar enfermedades crónicas en el ducto gastrointestinal en homosexuales. La aprobación por parte de la FDA en E.U. de los esteroides y de las drogas antivirales (AZT e inhibidores de proteasas) para tratar a pacientes con SIDA y a pacientes asintomáticos infectados con el VIH solo ha empeorado esta situación.

El estudio de Fauci et al en Tanzania demostró que el daño causado al sistema inmunológico de 1, 075 mujeres infectadas con el VIH fue posible revertirlo cuando ellas fueron puestas bajo un régimen dietético balanceado. El estudio que el Dr. Flores viene realizando desde 1998 en México, muestra como pacientes VIH - positivos se recuperan cuando se les somete a un régimen de dieta balanceada con complementos de ácido lipóico y se les retira del tratamiento con antivirales.


Objetivos del Estudio.

Los objetivos principales de este estudio son:

1. Salvar las vidas de pacientes con SIDA quienes se verían involucrados en este estudio y a los cuales se les daría tratamiento médico basado en hechos científicos y no en asunciones e hipótesis no comprobadas. La evidencia médica presentada anteriormente y la literatura ya publicada al respecto, demuestran claramente que la hipótesis - VIH es falsa y que las drogas antivirales y los corticoesteroides que son actualmente utilizados para el tratamiento de pacientes VIH - positivos y de pacientes con SIDA están causando la muerte y enfermedades muy serias. Esta perspectiva clínica debe ser suspendida de una vez por todas. El tratamiento correcto que se debe de aplicar para curar el SIDA y otros problemas médicos complicados es el de evaluar la evidencia médica que concierne a cada grupo de riesgo. Se planea utilizar esta metodología para tratar cada caso futuro y así identificar las causas de la depresión inmunológica en cada paciente y cada paciente será tratado basándose en un protocolo científico que se concentre en revertir la enfermedad.

2. Proveer evidencia de que el SIDA no es causado por el VIH. Esto se logrará mediante el hecho de revertir el daño al sistema inmunológico en los pacientes VIH - positivos con el uso de una dieta adecuada, vitaminas, antioxidantes y otras terapias de soporte al paciente, pero sobre todo con el abandono total de toda medicina antiviral.

3. Los resultados de esta investigación deberán ser publicados en los periódicos científicos apropiados.

4. Terminar de una vez por todas con el mito de la hipótesis - VIH, salvar millones de vidas y billones de dólares, que bien pueden ser utilizados en realmente resolver los problemas de salud que afligen a la mayor parte de la población mundial.

5. La utilización de este documento como un arma legal en caso de que el paciente lo quiera utilizar para defenderse del acoso que sufre por parte de las compañías farmacéuticas, las instituciones de salud internacionales y su médico personal.


Métodos y Diseño del Estudio.

El Dr. Flores ha tratado a más de 200 pacientes que sufren de SIDA. La mayoría de estos pacientes han sido seropositivos. En todos estos casos se consideraron los aspectos de record médico, historia de la enfermedad, historia de uso de alcohol y drogas, historia de uso de medicamentos, toxicidad en los medicamentos e historia de usos de químicos en el lugar de trabajo. Para el tratamiento del paciente se hizo de manera individualizada una descripción del caso, una descripción de la enfermedad y del órgano que se ve afectado y recomendaciones para pruebas clínicas y tratamiento.


IV. Casos Clínicos.

Para llegar a este momento histórico en el cual es posible tratar a pacientes diagnosticados como “seropositivos” sin tomar en consideración la hipótesis - VIH, se tuvo que haber realizado mucha investigación y vivir en un país en donde el médico que lo hiciera no corriera el riesgo de perder su licencia. La metodología clínica y la terapia aplicada a cada paciente se basan en los resultados obtenidos por estos investigadores. En este trabajo sobre todo se aplican los resultados obtenidos por el Dr. Roberto Giraldo con su investigación que explica la función inmunodepresora de los distintos tipos de estresores inmunológicos (químicos, físicos, biológicos, mentales y nutricionales) y de las causas multifactoriales del Síndrome de Inmunodeficiencia. También se aplican los resultados obtenidos por el Dr. Mohamed Al-Bayati en su estudio sobre las propiedades inmunodepresoras de los glucocorticoesteroides y de las drogas ilícitas. Está de mas mencionar que los resultados obtenidos por el Dr. Peter Duesberg son también de crucial importancia para este trabajo con su investigación sobre los altos grados de toxicidad y facultades inmunodepresoras en los medicamentos anti-retrovirales y en las drogas ilícitas.

Antecedentes. De enero de 1998 a agosto del 2001 se trataron a poco más de 200 pacientes provenientes de Estados Unidos, Canadá, México, Ecuador, Colombia, Venezuela, Argentina, Brasil, Puerto Rico, España, Francia, Inglaterra, Italia, Nigeria, India y Japón. Correspondió al continente americano el 84% de los pacientes, a Europa el 10%, a África el 4% y a Asia el 2%. El 95% correspondió al sexo masculino y el 5% al femenino. Las edades de los pacientes abarcaron de recién nacidos a 50 años, con el mayor porcentaje de pacientes concentrándose de los 30 a los 40 años. En lo que se refiere a tendencia sexual, el 60% de mis pacientes son homosexuales, el 30% bisexuales y el 10% heterosexuales. La comunicación con los pacientes se dio 70% a través del internet, 25% a nivel personal y 5% por vía telefónica.

Durante el primer contacto, los pacientes por lo general preguntaban las consecuencias que sufrirían por el hecho de estar infectados por el VIH, si en realidad el VIH produce SIDA, si las pruebas de ELISA y Western Blot tienen alguna validez, también preguntaban sobre la relación que existe entre el VIH y la carga viral, CD4/CD8, sobre las consecuencias de tomar medicamentos anti-retroviarales, que sucede si se suspenden estos medicamentos, si en realidad existe el retrovirus VIH, que beneficios podría tener la medicina alternativa en un paciente VIH - positivo asintomático, que beneficios puede tener esta misma en un paciente VIH - positivo sintomático sometido a tratamiento con anti-retrovirales, cual es la relación entre el uso de drogas recreativas y el VIH, cual es la relación entre las relaciones sexuales y el VIH y por último, los pacientes por lo general preguntaban como podrían ampliar su conocimiento sobre la hipótesis de que las causas del Síndrome de Inmunodeficiencia no son virales.

Si se daba un segundo contacto, se le preguntaba al paciente si estaría interesado en participar en esta investigación, también se le hacían preguntas relativas a su perfil psicológico, a su tendencia sexual, preguntas relativas a su situación familiar y laboral, a su situación de pareja y por último, se le preguntaba al paciente cual era su actitud hacia la muerte y si había habido intentos de suicidio (no en todos los casos).


Metodología Clínica.

Para esta parte del estudio se formaron dos grupos de pacientes:

Grupo A: Pacientes VIH - positivos y sintomáticos recibiendo tratamiento anti-retroviral

Grupo B: Pacientes VIH - positivos asintomáticos sin recibir tratamiento anti-retroviral.

En ambos grupos se efectuó:

1. Historia clínica.

2. Exámenes de laboratorio clínico y exámenes radiológicos.

3. Investigación sobre el agente o los agentes inmunodepresores.

4. Valoración de estilo de vida, condiciones de la vivienda y del área laboral y de las rutinas diarias del paciente.

5. Análisis de los medicamentos prescritos previamente y en uso actual, tipo de medicamento, dosis y duración del tratamiento así como los efectos colaterales ocasionados por este.

6. Historia de vacunas y análisis de si el paciente había recurrido a la herbolaria o la medicina homeopática.

7. Valoración de los hábitos alimenticios del paciente.

8. Valoración del perfil psicológico del paciente.


La mayor parte de los poco más de 200 casos considerados para este estudio cumplieron con las propuestas y demandas que esta nueva alternativa de tratamiento les exigía:

1. Cambio en el régimen alimenticio del paciente.

2. Cambio hacia una actitud psicológica positiva ante las posibilidades de recuperación ofrecidas por el nuevo tratamiento.

3. Suspensión del tratamiento con anti-retrovirales.

4. El paciente VIH - positivo aclaraba sus dudas acerca de la alta toxicidad y facultades inmunodepresoras de los medicamentos anti-retrovirales.

5. Inicio en el uso diario de antioxidantes (ácido lipoico).

6. Acondicionamiento físico.

7. Sugerencia de un reordenamiento de la vida sexual del paciente (sin hacer ninguna valoración moral de la misma).

8. Reincorporación a las áreas laborales y vida familiar.

9. En el caso de ser detectadas, tratamiento específico de enfermedades infecciosas.


Durante el estudio a ningún paciente se le solicitó la prueba de ELISA o el Western Blot. Las pruebas de CD4, CD8 y Carga Viral se solicitaron en algunos casos pero en relación al estudio de enfermedades infecciosas y en ningún caso en relación con el VIH. El Perfil Torch se le solicitó al 80% de los pacientes. Uno de los hallazgos más significativos obtenido en este estudio es que se encontró que en el 60% de los casos, los pacientes estaban infectados por algún tipo de Herpes, factor que tal vez haya influido en el resultado positivo que el paciente obtuvo por medio de las pruebas de ELISA y el Western Blot.

También es importante señalar la diferencia en las perspectivas clínicas y de tratamiento entre la teoría viral y la no viral. En esencia, la diferencia es esta: Si el médico considera que el Síndrome de Inmunodeficiencia se adquiere mediante el retrovirus VIH, entonces este seguirá un protocolo de tratamiento definido por esta supuesta infección; este tipo de perspectiva no toma en cuenta la historia clínica del paciente, su sintomatología, su perfil psicológico, etc. En el caso de que el médico considere que el Síndrome de inmunodeficiencia NO es adquirido mediante el supuesto retrovirus VIH, entonces al paciente se le trata de manera individualizada, considerando todos los factores arriba mencionados y sin tomar en cuenta para nada su estatus como seropositivo.


Los Casos.

1. C. R. (México): Su valoración se realizó por medio de internet y a nivel personal en el 2001 durante dos días. Homosexual de 41 años de edad diagnosticado como seropositivo en el año 2000. Nunca recibió tratamiento con anti-retrovirales. Gran interés en la medicina alternativa y urinoterapia. Las pruebas de laboratorio dieron resultados positivos para el Herpes I y II. El tratamiento consistió en un cambio de su régimen alimenticio y en la ingestión de antioxidantes (ácido lipoico) y suplementos vitamínicos. Parte muy importante del tratamiento fue la de responder a las dudas de este paciente concernientes al VIH. Al ver este sus dudas aclaradas, sus niveles de stress se redujeron significativamente. Más tarde el paciente se trató su infección al Herpes.

Antes de iniciar el tratamiento este paciente ya había tomado la iniciativa de cambiar su régimen alimenticio, de descansar, de hacer ejercicio y de tratar sus niveles de stress y su depresión; factores que influyeron en su recuperación previa a la cita médica. También por iniciativa propia se hizo las pruebas de CD4 y Carga Viral durante su estancia en Estados Unidos cuando trabajaba como voluntario con enfermos de SIDA y cáncer. Durante esta estancia es testigo de los efectos que los anti-retrovirales tienen a largo y corto plazo en el organismo y decide de manera independiente jamás someterse al tratamiento con este tipo de medicamentos, a pesar de que varios médicos le habían sugerido iniciarlo cuanto antes. A la fecha el paciente se encuentra en buen estado de salud.

2. Anónimo por recuesta del paciente. (México): Su valoración se realizó por medio de internet y a nivel personal durante dos días en el 2001. Médico ginecobstetra de 41 años, homosexual y diagnosticado como seropositivo en 1999. Los resultados de las primeras pruebas a las que este paciente se sometió en los Estados Unidos fueron estos: CD4 11, CV > 500, 000 copias. Presentaba un cuadro de enfermedades oportunistas; candidiasis, herpes simple, citamegalovirus en el aparato digestivo y molusco contagioso. Comenzó a recibir tratamiento con los anti-retrovirales Combivir y Crixivan, ocasionando estos un cuadro de anemia hemolítica a causa de la cual el paciente tuvo que recibir 6 transfusiones de sangre. Después el coktail fue cambiado a la combinación de Sustiva, Abacavir y Epivir, suspendiéndolo al segundo mes y sustituyéndolo con Kaletra, Epivir y Zerit, con una duración aproximada de 7 meses y con los siguientes resultados en sus pruebas de laboratorio; CD4 270 y CV indetectable.

Al iniciar el paciente el nuevo tratamiento, éste suspende toda ingestión de medicamentos anti-retrovirales, cambia dieta e inicia un régimen de condicionamiento físico. Nuevas pruebas de laboratorio indican un resultado positivo para herpes genital. Se inicia también un tratamiento con ácido lipoico, vitamina C y transfer factor. Es importante subrayar que la información otorgada a este paciente sobre la teoría no viral y las nuevas perspectivas de tratamiento clínico jugaron un rol tan importante como el del cambio de dieta y de régimen físico. En cada uno de los pacientes tratados en este estudio el aspecto psicológico de la enfermedad fue cuidadosamente monitoreado, pues se confirmó que en cada uno de ellas y ellos su actitud frente a la enfermedad podía causar un cuadro de inmunodepresión. Hasta la fecha este paciente se encuentra en buen estado de salud.

3. M. A. (México): Su valoración se realizo por medio de internet y a nivel personal durante dos días. Homosexual de 30 años, diagnosticado como seropositivo en agosto del 2001. En la primera cita médica el paciente presentó un estado de salud favorable. Inmediatamente después de que el paciente fue diagnosticado como seropositivo, este sufrió una perdida significativa de peso, la cual él mismo atribuyó a las preocupaciones que le ocacionó la diagnosis. Uso intensivo de poppers (nitratos de akyl) durante el año 2000. Acude al Centro para El Desarrollo del Potencial Humano en donde le proponen iniciar tratamiento con anti-retrovirales. El desecha esta propuesta debido a la información que obtuvo por medio del website de Alive and Well.

El tratamiento que se le aplica a este paciente es el mismo que se le sugirió a los dos pacientes anteriores; cambio de dieta y régimen físico, ingestión de ácido lipoico y multivitamínicos y sumo cuidado en sus niveles de stress y depresión. Hasta la fecha el paciente se encuentra en buen estado de salud.

4. R. I. (México): Valoración por internet y personal durante dos días. Homosexual de 30 años diagnosticado como seropositivo en julio del 2001 presentando estos resultados de laboratorio: CD4 150, CV 135 000. El paciente acude a CONASIDA en donde le informan que los nuevos tratamientos con los cockteles de anti-retrovirales le prolongarían la vida con “un poco más de calidad”. Incluyo el testimonio de este paciente para que se logre entender el dolor por el que ellos y ellas pasan al iniciar el tratamiento con los anti-retrovirales:
“Padecer los efectos de los medicamentos es otro asunto que no le da a nuestra vida mucha ‘calidad’. No se imagina la nausea y malestares que me han ocasionado estos medicamentos. Me agarró una tos desde febrero que para el verano no se me quitaba. Yo creía que había contraído tuberculosis (de hecho no se si fue así o no). Después se me inflamó un ganglio en la ingle izquierda y tuve que ser hospitalizado durante tres días. También padecí una infección estomacal después de haber tenido ‘algodoncillo’ en la boca.”

En el Hospital de Nutrición en México D.F. le administran el cocktail con esta combinación; Saquinavir, 3TC y AZT. Es importante indicar que su cuadro de inmunodeficiencia lo presentó previo a su diagnosis como seropositivo, pero también es importante señalar que estos síntomas continuaron y se agravaron después de que el paciente inició el tratamiento con anti-retrovirales.

Al iniciar el nuevo tratamiento, el paciente suspende toda ingestión de anti-retrovirales y se le indican los cambios de dieta con complementos de antioxidantes y los cambios en su régimen de condicionamiento físico. Como en los previos pacientes, estas indicaciones lo llevarán a un óptimo funcionamiento de su sistema inmunológico. A la fecha el paciente se encuentra en buen estado de salud.

5. G. E. (mexicano residente en España): Valoración por internet y personal durante tres días. Hombre de 33 años (tendencia sexual no especificada por el paciente), diagnosticado como seropositivo en marzo del 2001. En Barcelona, España acude a ver a un especialista gastroenterólogo debido a problemas digestivos que ha sufrido por más de 15 años; diarreas, mala digestión, gases, falta de apetito, etc. Esta cita médica el paciente la realiza, pues los síntomas se habían vuelto más frecuentes y molestos. Se le practican una endoscopía y una colondoscopía, razón por la cual le es solicitada la prueba del VIH. Obtiene los siguientes resultados: endoscopía; colitis inespecífica, VIH; positivo.

El paciente es remitido a Seguridad Social en donde se le realizan las pruebas de Carga Viral y recuento de Células T4, obteniendo estos resultados: CV; 400 000 copias, T4; 174. Inicia un tratamiento con esta combinación de anti-retrovirales; Ziagen, Epivir y Viracept. Porque sus médicos lo consideraron encontrarse en una situación de alto riesgo lo sometieron a un tratamiento profiláctico que incluía Lederfolin y Septrim Forte. Debido a sus problemas estomacales también se le recetó Omeoprazol. A la segunda semana de ser iniciado el tratamiento se le tuvo que sustituir el Ziagen debido a problemas de irritación en la piel. Se le cambió la combinación de anti-retrovirales por una de Combivir y Viracept continuando con los profilácticos. Debido a que más adelante el paciente sufre de problemas de garganta, se le recetan antibióticos y desinflamatorios. La ingestión en el número de pastillas que el paciente toma diariamente va en constante aumento agudizándole sus problemas estomacales. Sufre de mareos, asco y toda una serie de efectos colaterales. Incluyo el testimonio del paciente para de nuevo subrayar sobre los efectos secundarios que los cocteles tienen en el organismo:
“Como podrá usted observar, el haber sido diagnosticado como seropositivo me ha llevado a vivir dependiendo de fármacos que pienso que en lugar de contribuir a mejorar mi salud la están deteriorando. Siento que mi cuerpo ya no soporta más medicamentos y mi estómago cada vez funciona de peor manera al mismo tiempo que pierdo peso y mi estado emocional empeora”.

Al iniciar el nuevo tratamiento inmediatamente se le suspende toda medicación con anti-retrovirales. Se le indican los cambios de dieta y en hábitos de condicionamiento físico que se le sugieren a todos los pacientes. Debido a que el paciente ya se había informado acerca de la teoría no viral previo a la cita, tiene una mayor receptividad hacia las posibilidades del nuevo tratamiento. Se le tratan sus problemas de desnutrición, stress y depresión que el paciente venia exhibiendo previos a su diagnóstico como seropositivo. Su cuadro de depresión es agudo y el paciente me informa que viene sufriéndolo desde hace ya tres años. Se le tratan también la toxoplasmosis y el citamegalovirus que también el paciente había exhibido previos a su diagnóstico como seropositivo.

En comunicación por internet, el paciente me informa que en efecto, continúa con su abandono de toda ingestión de medicamentos anti-retrovirales y que se ha puesto bajo el cuidado de un naturópata que comparte la idea de que el SIDA no es causado por el VIH. Me informa que todavía sigue teniendo fiebres y que su pérdida de peso continúa, más él esto lo atribuye a un proceso de desintoxicación. Sigue exhibiendo cuadros de tipo viral como gripes y sinusitis y sigue teniendo problemas estomacales, más se siente satisfecho pues al menos se ha librado de los efectos secundarios que los anti-retrovirales tenían en su organismo. Al momento del último contacto el paciente exhibía un cuadro de relativa mejoría. Más el contacto con el paciente se pierde y no se puede continuar un monitoreo estricto de su proceso de desintoxicación. Es también un factor de alto riesgo que el paciente nunca se trata su cuadro de depresión.

Como comenté más arriba, en cuestiones de salud no hay salidas fáciles. El hecho de que el paciente crea entender que el Síndrome de Inmunodeficiencia no es causado por el retrovirus VIH, no quiere decir que este simple acto de fe ciega lo pueda llevar a ella o a él a una recuperación. Para que el sistema inmunológico de cualquier paciente se recupere de años y años de automedicación, mala dieta, adicciones y demás abusos, lleva tiempo. Tanto el paciente como el médico deben aprender a tener paciencia y como también lo mencioné más arriba; la salud no es una receta, es una disciplina.

6. C. A. (México): Valoración personal durante tres días. Hombre heterosexual de 31 años diagnosticado como seropositivo en agosto del 2001. Su estado general de salud deteriora presentando un cuadro de diarrea esporádica con pérdida de peso, razón por la cual su médico le indica hacerse una serie de análisis, entre ellos la prueba de ELISA. Al salir su prueba para el VIH positiva, le sugieren al paciente acudir al centro de ayuda llamado PROFIN VIH, a donde se le ordena hacerse la prueba de Carga Viral obteniendo como resultado; log. 3.9, 8 475 copias/ml.; sensibilidad 400 copias/ml. Debido a que el paciente ya estaba informado acerca de la teoría no viral por su lectura de ¿Qué Tal Si Todo lo que Crees Acerca del SIDA Fuera Falso? De Christine Maggiore, él tiene grandes dudas acerca de si debe iniciar el tratamiento con anti-retrovirales que en este centro de ayuda le están tratando de administrar. Los medicamentos que le recetan son estos; Fortovase, Ritonavir, Septrim, Daraprim, Ácido Fólico y Ferval los cuales el nunca toma.

Al iniciar el nuevo tratamiento se ordenan nuevos exámenes de laboratorio y coprocultivo obteniendo resultados positivos para salmonela/ scherichia coli. Se trata la salmonela con Ciproxina durante 10 días. Se le ordena al paciente un cambio de dieta debido al cuadro de aguda desnutrición que exhibe. También se evita que el paciente inicie todo tratamiento con anti-retrovirales. Hasta la fecha el paciente ha exhibido un cuadro de franca recuperación clínica. Su caso es de especial interés para este estudio, pues él representa al grupo de pacientes cuyo cuadro de inmunodeficiencia no se debe al abuso de drogas ni al de los efectos secundarios de los anti-retrovirales en su organismo. Su inmunodepresión venía siendo causada por una pésima dieta, por infecciones en el sistema digestivo y por un cuadro combinado de stress y depresión. Incluyo parte de su testimonio para aclarar este punto:
“Mi alimentación desde que tengo uso de razón ha sido un desastre. Vivo en un área geográfica de México que no creo sea muy distinta a otras, donde la mayoría de la gente fuimos acostumbrados desde nuestra niñez a la comida fácil: tacos, tortas, enlatados, embutidos, comida chatarra, guisos grasosos y sin higiene.”

La desnutrición es una de las principales causas de inmunodepresión hoy en día. Sobre todo en los países del llamado Tercer Mundo. A un problema de salud que tiene causas económicas, políticas y culturales se le trata de adjudicar una causa con orígenes virales. Uno de los objetivos de este estudio es aclarar este malentendido: lo que necesitamos en África, Latino América y Asia no son más medicamentos anti-retrovirales sino más fondos para realmente solucionar problemas básicos de salud que llevan a millones de personas a la muerte por lo que en el llamado Primer Mundo consideran enfermedades superadas. Y pregunto: ¿Superadas para quién?

7. Anónimo por recuesta del paciente (Venezuela): Valoración a través de Internet. Mujer heterosexual de 35 años. En 1995 ella y su novio realizan un viaje a Estados Unidos donde se hicieron varios exámenes médicos incluyendo la prueba del SIDA. Ya de vuelta en Venezuela la pareja recibe los resultados de los exámenes los cuales indican que salieron ‘positivo’ para el VIH. Debido a que nunca se habían hecho pruebas de este tipo, interpretan estos resultados de manera positiva, es decir; ambos pensaron que NO estaban infectados por el VIH. Seis años más tarde la paciente se entera por Internet que ese resultado no tiene nada de positivo. Alarmada, primero contacta al Dr. Giraldo y después contacta al Dr. Flores. Lo único positivo en este malentendido lingüístico, es que ni ella ni su pareja se sometieron a ningún tratamiento con anti-retrovirales.

Tanto el Dr. Giraldo como el Dr. Flores le reafirman que su status de seropositividad nada tiene que ver con su actual estado de salud, más ambos le recomiendan reforzar todos los aspectos concernientes al óptimo funcionamiento de su sistema inmunológico. La paciente acude a su ginecólogo en Venezuela y en las pruebas de laboratorio le detectan el hongo Torulopsis Glabrata (por primera vez). Ella expresa dudas de si esta infección se debe al VIH.

Al momento de iniciar el nuevo tratamiento con suplementos de ácido lipoico e indicaciones dietéticas, la paciente nunca ha tomado anti-retrovirales. Tampoco padece de desnutrición y hace ejercicio regularmente. Se comunica de manera constante a través de Internet, facilitando el monitoreo de su perfil psicológico tan necesario en todos los pacientes incluidos en este estudio. En sus antecedentes clínicos el aspecto más importante es que previo a su prueba de ELISA, la paciente padeció hepatitis. Le comunica al Dr. Flores su deseo de casarse y de tener un hijo. Sus controles ginecológicos están en orden y mantiene una sola pareja desde 1994. A la fecha, la paciente se encuentra en buen estado de salud.

8. Familia anónima. (País no especificado por respeto a la familia de la paciente): Valoración a través de Internet, por vía telefónica y a nivel personal durante 6 semanas en Sudamérica (4 semanas la primera vez y 2 semanas la segunda). La madre, el padre y la hija recién nacida, cada uno de ellos en su momento, fueron diagnosticados como seropositivos. El padre presentó un cuadro de hepatitis en 1982 siendo diagnosticado como seropositivo en 1987. A partir de este momento comienza a seguir una rigurosa dieta macrobiótica, mucho ejercicio y una concentración nunca antes experimentada en sus actividades artísticas. A la madre se le detectó toxoplasmosis en los años 80 siendo diagnosticada como seropositiva en 1992. El padre logra convencerla de seguir su elección inicial y ninguno de los dos inicia tratamiento con anti-retrovirales. Hasta la fecha ambos gozan de buena salud; el padre con ya 15 años de ser seropositivo y la madre con ya 10 años de también serlo, sin que ninguno de los dos haya presentado síntomas asociados con el Síndrome de Inmunodeficiencia.

En el año 2000 la pareja decide tener un hijo. Contactan a Christine Maggiore quién los refiere al Dr. Juán Flores en México. El Dr. Flores les ayuda a reafirmar su idea de que no habría ningún problema en que una pareja seropositiva tuviera un hijo. El matrimonio se encuentra entusiasmado, pues conocen los casos de Christine Maggiore y de docenas más de madres seropositivas, quienes en los Estados Unidos han dado luz a bebés completamente sanos y que continúan viviendo en buen estado de salud.

La madre se embaraza inmediatamente teniendo control prenatal por su ginecobstetra. Debido a una decisión tomada por la pareja, deciden tener un parto vaginal cuando todo indicaba una intervención quirúrgica por cesárea. Ese parto ‘natural’ tuvo un periodo expulsivo de mas de tres horas. Este hecho no le fue informado al Dr. Flores sino hasta unas semanas antes de que la bebé muriera debido a toda una serie de complicaciones. Inicialmente este parto ocasionó una flebitis severa en la pierna derecha de la madre y un problema neumónico en la bebé del cual ella nunca se pudo recuperar.

Al mes de nacida la bebe fue internada por su pediatra, pues presentaba un cuadro de fiebre y era necesario desechar la posibilidad de meningitis. Ho hubo punsión lumbar y a los tres días la bebe fue dada de alta con un ‘rash’ virosico. Al tercer mes la recién nacida presenta un cuadro de insuficiencia respiratoria. Luego de tomar radiografías y más estudios terminó siendo internada con el siguiente diagnóstico; infección urinaria, pneumocystis carinii con hepato y esplenomegalia. A la semana de internamiento la bebé sufre un empeoramiento mecánico y tiene que pasar la siguiente semana en terapia intensiva dentro de un respirador.

Debido al status de seropositividad de la bebé, los médicos infectólogos no cesan en presionar a los padres para que la inicien en un tratamiento con anti-retrovirales. El Dr. Flores interviene personalmente y obtiene un moratorium para que no se le administre ningún tipo de medicamento anti-retroviral a la bebé hasta no dejar que por si mismo su sistema inmunológico diera señales de recuperación. Sin anti-retrovirales la bebé se recupera y es dada de alta.

Pasan los meses y es necesaria una segunda visita por parte del Dr. Flores, pues la salud de la bebé ha empeorado. A su arrivo el Dr. Flores se da cuenta que ni él ni el pediatra de la bebé tienen ninguna autoridad para continuar la terapéutica clínica de manera estricta. Paralelo al tratamiento clínico los padres decidieron seguir un tratamiento homeópata y de medicina naturista sobre el cual el Dr. Flores y el pediatra no tuvieron ningún control. Fue durante esta segunda visita cuando el padre le informa al Dr. Flores que el parto de la bebé había sido vaginal cuando todo indicaba un parto por cesárea: debido a que la bebe fue expuesta a tres horas de periodo expulsivo, esto usualmente ocasiona daño cerebral, infecciones por bacteria, hongos o virus que pueden llevar a un grave deterioro neurológico e infeccioso en el o la recién nacida. Unas semanas después el Dr. Flores recibe la noticia por medio del pediatra de que la niña ha fallecido.

Aclaro que escribo esto con mucho dolor y sin la menor intención de señalar culpabilidades. En la introducción comenté que el paciente debe tener un rol más activo en el manejo de su salud, pero esto se tiene que hacer con un profundo conocimiento de causa y con mucha responsabilidad. Tanto el paciente como el médico caminamos sobre una cuerda floja entre dos grupos de extremistas ideológicos; aquellos que creen que la solución a todos nuestros problemas de salud se encuentra en la fabricación de drogas cada vez más potentes y tóxicas; y aquellos que creen que la solución es volver a una medicina casi prehistórica que niega todos los logros concretos de la medicina científica. Es de crucial importancia que se encuentren puntos de encuentro entre la medicina científica y la medicina tradicional. Fue la inhabilidad de caminar sobre esta cuerda floja la que llevo a la muerte a esta preciosa niña.

9. C. L. (México): Valoración a través de Internet, a nivel personal durante tres días y por vía telefónica cada ocho días. Homosexual de 40 años de edad diagnosticado como seropositivo por la prueba de ELISA y Western Blot en el año de 1990. Durante este año ingresa a CONASIDA e inicia un tratamiento con AZT el cual suspende al mes debido a trastornos hematológicos (Neutropenia, CD4; 700). En 1992 inicia un tratamiento naturista con una duración de 12 días con el fin de incrementar sus defensas inmunológicas. Jamás vuelve a reiniciar este tratamiento, pero en este periodo el paciente usa frecuentemente drogas ilícitas y ‘poppers’. En aquél entonces su conteo de CD4 era de 550. En 1995 inicia una relación heterosexual durante un año y medio sin nunca tener relaciones sexuales con su pareja. En 1996 vuelve a tener relaciones homosexuales de manera esporádica. Su conteo de CD4 es de 250. No presenta ningún cuadro de enfermedad contagiosa oportunista. En 1997 el paciente comienza a sentir debilidad, infecciones en la piel y baja de peso dramáticamente. A finales de este año su debilidad generalizada no le permitió trabajar. En enero de 1998 el paciente presentó un cuadro de herpes sóster en el vientre. Inicia un tratamiento de 20 días con Aciclovir y antibióticos. Presenta un cuadro de principios de neumonía, anemia y candidiasis en el esófago y garganta. Su contéo de CD4 es de 17 y su Carga Viral de 97 000. En febrero de 1998 el paciente comienza su primer tratamiento con anti-retrovirales; Saquinavir, Videx y Zerit es el primer coktel que le administran, todo por cortesía del IMSS (Instituto Mexicano del Seguro Social). Durante los primeros siete meses su conteo de CD4 se incrementa a 650 con CV indetectable. El coktel le provoca al paciente problemas de hipersensibilidad en la piel y neuropatías periféricas. Se continúa esta dosis durante dos años y medio hasta que el paciente decide abandonarla. Esta combinación de anti-retrovirales le afecta la grasa del rostro y le ocasiona problemas en el vientre. Conteo de CD4; 450 con CV de 8 000. Relaciones sexuales esporádicas cada 4 o 5 meses. En el 2001 vuelve a tener una relación heterosexual sin tener relaciones sexuales con ella ni con otros hombres.

En marzo del 2001 el paciente presenta un nuevo cuadro de enfermedades oportunistas; candidiasis en glande, debilidad, perdida de peso con un CD4 de 220 y una CV de 115 000. En julio del 2001 inicia un nuevo tratamiento con anti-retrovirales: Ritinavir, 2 cápsulas diarias; Indinavir, 4 cápsulas diarias; Estabudina, 2 cápsulas diarias; Lamibudina 2 comprimidos diarios, todo prescrito por médicos del IMSS (Instituto Mexicano del Seguro Social).

Al iniciar el nuevo tratamiento se ordenan pruebas de laboratorio que dan como resultado un perfil hepático alterado (transominasas y fosfatasa alcalina). Se le indican al paciente los cambios de dieta y de régimen físico comunes al tratamiento. Se considera que la ingestión de ácido lipoico, polivitamínicos y vitamina C son esenciales para que el paciente se recupere. El contacto paciente-médico no se rompe (como en algunos de los otros casos) y el monitoreo de su proceso de recuperación se facilita. Hasta la fecha el paciente goza de buena salud.

10. Feliciano, Maritza. (Puerto Rico): Valoración a través de Internet, por vía telefónica y a nivel personal durante dos semanas. Mujer heterosexual de 32 años diagnosticada como seropositiva en 1999. Como consecuencia de esta diagnosis pierde su trabajo. Su ‘seropositividad’ es captada cuando ella intenta donar sangre. Padece una infección de varicela previa a esta diagnosis y es vacunada contra influenza y hepatitis. Inicia tratamiento con anti-retrovirales durante seis meses padeciendo intensos efectos colaterales; diarrea, depresión, trastornos hematológicos y anemia.

Acude a México para iniciar el nuevo tratamiento acompañada por su pareja. Se le realizan exámenes de laboratorio que presentan estos resultados; negativo para herpes pero positivo para varicela. Se le indican los requeridos cambios en sus hábitos alimenticios con complementos de antioxidantes y se le tratan la varicela y su cuadro de depresión aguda. Abandona toda ingestión de medicamentos anti-retrovirales.
Esta paciente es un ejemplo de una relación paciente-médico ideal; tanto ella como su pareja han mantenido el contacto durante los últimos tres años, hecho que ha facilitado el monitoreo de su proceso de desintoxicación y de la posibilidad de cualquier recaída por factores tanto fisiológicos como psicológicos. Por medio del Dr. Flores establecen contacto con el Dr. Mohamed Al-Bayati para estudiar la posibilidad de establecer una demanda contra las compañías farmacéuticas que producen los medicamentos anti-retrovirales que le ocasionaron inmunodepresión y casi la muerte. Hasta la fecha la paciente se encuentra en buen estado de salud.

11. A. O. (Ciudadano de Nigeria residiendo en Estados Unidos): Valoración a través de Internet, por vía telefónica y a nivel personal durante diez días. De todos los casos incluidos en este estudio, este es el único paciente en el que no se realizaron ni la prueba de ELISA ni la del Westarn Blot.

Realiza un viaje de negocios a África para el cual toma medicinas contra la malaria acompañadas de complementos vitamínicos y cápsulas antivirales. A los pocos días de viaje sufre de diarrea y se contagia de gripe. Toma immodium y la gripe y la diarrea desaparecen. A su regreso a Estados Unidos el paciente comienza a presentar problemas gastrointestinales con diarrea y coloramiento blanco en la lengua. El paciente le comenta al Dr. Flores que estando en África leyó un panfleto en donde estos síntomas eran considerados como típicos de los comienzos del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida. Es importante señalar que en algunas regiones de África solo basta con presentar los síntomas del Síndrome de Inmunodeficiencia para que ella o él se consideren como ‘infectados’. Existen razones político-económicas detrás de este hecho. Es tal la ansiedad en el paciente que decide ir a México para iniciar el tratamiento.

Cuando la terapia se inicia se ordenan pruebas de laboratorio que dan resultado positivo para la malaria. Se le recomiendan los cambios de dieta con complementos de ácido lipoico y se le tratan los síntomas específicos referentes a su infección a la malaria. El paciente sigue las indicaciones del tratamiento al pie de la letra y ha mantenido el contacto desde 1999. Esto ayuda a que su proceso de desintoxicación y cualquier posibilidad de recaída sean monitoreados de cerca. Quisiera aclarar que es este paciente el responsable de que se estableciera el contacto con el Dr. Mohamed Al-Bayati debido a sus contribuciones económicas. Sin su labor Clinical Trials in AIDS Patients y esta investigación nunca hubieran visto la luz del día. Es gracias a gente como él que este movimiento de pacientes y médicos considerados disidentes por pacientes y médicos considerados ortodoxos crece día a día. La hipótesis que establece que el Síndrome de Inmunodeficiencia es causado por el retrovirus VIH será deconstruida paciente por paciente.


Conclusión.

Al terminar la narración de la mayoría de los casos incluidos en este trabajo escribo; “hasta la fecha él o la paciente gozan de un buen estado de salud”. En algunos de ellos trato de explicar las razones por las cuales el paciente todavía se encuentra enfermo o él o ella, trágica e innecesariamente, han muerto. Repito lo dicho en el principio de este documento: la salud no es una receta; es una disciplina.

Después de tratar a más de 200 pacientes en los últimos cinco años he comprobado que aquellos que siguieron los requerimientos del tratamiento cuyo paradigma considera que el Síndrome de Inmunodeficiencia no tiene causas virales, sobrevivieron. Aquellos pacientes que trataron de tomar atajos ideológicos y siguieron siendo víctimas de sus adicciones a drogas legales o ilegales continuaron con sus cuadros de inmunodepresión o murieron. Lo repito una vez más: la salud no es una receta; es una disciplina.

El Síndrome de Inmunodeficiencia existe; es perfectamente real. Todo depende de si el médico y el paciente deciden si éste tiene causas virales o no. Después de tanta muerte, dolor y salud conquistada, llegué a la conclusión de que la inmunodeficiencia es un problema médico que tiene alcances filosóficos. Toda persona antes de morir sufre de inmunodepresión. Todos mis pacientes en algún momento pensaron que iban a morir. Algunos murieron. Todos ellos y ellas, desde distintas tradiciones y culturas le trataron de otorgar un sentido a este proceso entrópico. Pero la muerte siempre está más acá y más allá de la metáfora. Paradójicamente, de manera muy natural, tratamos de metaforizar nuestra muerte. Más nuestro cuerpo no es una metáfora; es demasiado real y siente placer, dolor y eventualmente muere. Nuestro cuerpo siempre se queda atrapado entre su significado y su significante: nuestro cuerpo es una nube de sensaciones condenada a disolverse y renacer. Nosotros somos esa nube.

Tanto los pacientes como los médicos leemos entre líneas las circunstancias político-económicas del mundo, las teorías ortodoxas o disidentes y los síntomas demasiado reales de aquellas personas que padecen inmunodepresión. Aquellos pacientes y médicos que se esfuerzan por ir más allá de la información que les es dada a través de los medios, sobreviven. Los que no se esfuerzan, se vuelven un número más en las estadísticas de la CDC (Center for Disease Control), el NIH (National Institute of Health) y la OMS (Organización Mundial de la Salud).
En última instancia esta es la opción: tanto el paciente como el médico deben decidir si desean devenir un número más en las estadísticas de las instituciones totalitarias arriba mencionadas o convertirse en una vida llena de posibilidades. Esta es la opción. Ni más ni menos: Tú decide.



Fuente: Vivo y Sano México